Los conflictos y desafíos del proceso adolescente en relación con la reapropiación del propio cuerpo, de la historia y de la vida los alejan de la autoridad parental, del proyecto identificatorio y de los ideales parentales. Los adolescentes se encuentran en continuo cambio en el enfrentamiento con sus padres y hermanos y en la dinámica con sus pares.
Dado que la adolescencia conlleva momentos de inseguridad, desconcierto, rebeldía y hasta provocación, son necesarias altas dosis de adaptación de las familias con el aprendizaje o reaprendizaje de la vinculación por parte de todos.
La necesidad de independencia y autonomía de los jóvenes va en paralelo además con el comienzo del alejamiento de los padres, esto muchas veces favorece la falta de comunicación, el miedo y la introversión que desencadenan crisis.
No existe una realidad relacional única y objetivamente por descubrir, sino que las realidades de las relaciones vinculares se construyen desde la subjetividad.
LF